2013, la lucha continúa
Estatalistas nabarros
En el 2013 la lucha continúa porque los nabarros y nabarras no podemos pasar
ni una más, estamos obligados a la insumisión política, fiscal y jurídica
frente al imperialismo colonial español y/o francés. Por ello debemos
movilizarnos ante las atrocidades e injusticias que vemos lamentablemente a
diario, ante la avalancha de datos a cada cual más terrorífico para nuestro
futuro inmediato en lo económico, en lo político y en lo social para Nabarra.
Cada uno desde su ámbito debe iniciar o proseguir la lucha, estando hermanados
y juntos en la calle, asumiendo las necesidades y consecuencias de nuestro
interiorizado independentismo, dado que no solo nos estamos jugando nuestro
propio futuro, sino también el de nuestros hijos e hijas, en definitiva, el
porvenir de nuestro Pueblo, de nuestra Nación.
Seamos conscientes, el futuro se decide cambiando el actual presente
aterrador. No podemos permanecer quietos, no debemos ser pasivos, en definitiva
no hay que ser siervos de los imperios
español y francés, transigentes y leales cual esclavo sojuzgado bajo el
síndrome del colonizado.
Los nabarros y nabarras debemos saber que los verdaderos patriotas de
nuestro País son aquellos que están a nuestro lado, compartiendo necesidades y esplendores.
Gente corriente con ganas de cambiar una sociedad como la nabarra, que en la
actualidad posee innumerables carencias y miserias, que vive en un mundo repleto
de falsedades, mentiras y medias verdades, tanto en materia histórica como
política, finalmente con miedo a luchar y coger lo que es suyo.
No se trata de pedir migajas al Reino de España y a la República de Francia,
ni “reeditar” un nuevo pacto, ya que éste nunca realmente existió, sino
recuperar desde una acción físicamente independentista unos Derechos ganados a
pulso en nuestra larga trayectoria independiente y soberana, reclamada por las generaciones
anteriores que ya sufrieron la apisonadora imperialista y colonial de españoles
y/o franceses. Queremos recuperar y disponer de nuestra soberanía secuestrada para
llevar a cabo los necesarios procesos de cambio social, económico y político
que Nabarra requiere en el más inmediato futuro, por no decir en el presente.
Aunque a alguien le pueda parecer radical, lo radical es que miles de
nabarros y nabarras no tengan trabajo; lo radical es que con la cantidad de
capitales que se genera en este País, nuestro País, haya miles de nabarros y
nabarras bajo la cruel amenaza de entrar en el lamentable umbral de la pobreza.
Ante tal realidad radical, solo son efectivas soluciones que ataquen la raíz
del problema: nuestra dependencia
obligada por la fuerza de las armas, bien al Reino de España o bien a la
República de Francia.
Hoy, en el presente año, la continuidad de nuestro sometimiento y subordinación
provoca que las opiniones, decisiones e intereses de la Nación Nabarra, sigan
siendo ninguneados despóticamente por los imperios de España y Francia cuando
les conviene, así como por aquellos agentes colonizados y finalmente
colonizadores, los cuales se benefician en grado sumo de nuestra marginación
política, económica y social, practicando la censura contra el movimiento
nabartzale o estatalismo nabarro.
Los nabarros y nabarras debemos dar una demostración de unidad Nacional y
solidaridad intrafronteriza ante las imposiciones en materia territorial llevas
a cabo por el colonialismo español y francés. Los soberanistas nabarros y
nabarras queremos defender la unidad política Nacional de Nabarra, junto al
respeto y a la igualdad entre todas las comarcas de nuestra bella Baskonia.
Durante el largo proceso de dominación colonial española y francesa de
nuestra amada Patria, una etapa eternizada de sometimiento y el sojuzgamiento
político, económico, social, cultural, lingüístico y religioso, podemos afirmar
que en algo han podido cambiar las formas, pero el verdadero fondo de la
opresión y la dependencia se han mantenido inquebrantables para el beneficio
esclusico de las metrópolis de Madrid y París. Con cualquier régimen político
en España o Francia, Nabarra ha continuado arrastrando los peores indicadores
sociales de toda su historia.
Nabarra es una de las últimas colonias que lamentablemente continúan
existiendo hoy día en el planeta y, como todo Pueblo-Nación, Nabarra tiene Derecho
a decidir su futuro, a derribar las fronteras impuestas que impiden la relación
de igual a igual con el resto de Naciones del Mundo.
La independencia, la descolonización, no son sólo la recuperación de
nuestra soberanía, sino la capacidad de poder organizar nuestra economía de una
manera que atienda a nuestras verdaderas necesidades sociales, dotando por fin
a la población de una calidad de vida digna, donde no se vulneren los Derechos
de los trabajadores. Una economía verdaderamente diversificada, apostando por
la soberanía alimentaria e industrial y la sostenibilidad ambiental.
Reivindicamos nuestra ancestral identidad vascona con todos sus elementos.
Todas las Naciones han tenido y tienen un devenir histórico, y queremos ser exclusivamente
nosotros mismos, nabarros y nabarras, los que determinemos cuál ha de ser.
Ahora, sumidos en una profunda crisis económica sin esperanzas y perspectivas
de mejorar, y con un nuevo avance del españolismo y el afrancesamiento, tenemos
la obligación de prosperar en todos los frentes con sentido histórico, desde la
verdadera independencia política, para alcanzar la liberación Nacional y el
progreso social.
En este año debemos continuar la lucha por la liberación Nacional y el
cambio social de los nabarros y nabarras, que los hechos y la historia nos
demuestran sólo puede llegar de la mano de la descolonización e independencia
del Estado de Nabarra, junto a una Constitución basada en el Derecho Pirenaico,
donde el auzolan, la democracia,
la libertad, la igualdad y la solidaridad sean las bases ulteriores de
nuestra organización social.
El tiempo de la mesura ya se ha agotado. En la calle debe cristianizarse el
termómetro independentista de nuestra sociedad. Debemos prender el fósforo del
descontento, el fuego de la rebeldía y de la movilización, que nos lleve a
afrontar ese futuro que todos los nabarros y nabarras necesitamos y además, tenemos
Derecho.
Con paso firme debemos bajar a la calle, pasar a la desobediencia activa
para transformar esta sociedad en una fortaleza, desde donde se rechacen todos
los intentos de frenar el ansia libertaria de este Pueblo-Nación, Nabarra, de
escribir nuestro propio futuro.
Este año más que nunca, nabarros y nabarras, la lucha continúa.
